Objetivo Birmania
¿Quien no recuerda o ha visto la película ‘Objetivo: Birmania’ protagonizada por Errol Flynn?
¿Que amante de los libros de viajes no ha oído/leído Burmese Days de Georges Orwell, o Road to Mandalay de Ruyard Kippling?
Birmania (actualmente llamada Myanmar) evoca templos, guerras, lejanía y yugo militar durante décadas.
Desde hace años, los occidentales empezamos a oir hablar de Aung San Suu Kyi líder de la Liga Nacional Democrática (NLD) que en 1991 recibió el Nobel de la Paz y en 2010 quedó liberada de su arresto domiciliario después de más de 20 años.
El pasado noviembre, su partido logró una mayoría absoluta en el Parlamento, y aunque ella no podrá ser presidenta, su partido gobernará en un futuro próximo (los tiempos en este país sin democracia no son los mismos que los nuestros). Lo que si he podido comprobar es que el pueblo llano esta feliz con este triunfo, que es de ellos, y TODOS suenan con el nuevo gobierno. Anectota: hace un ano (nov.2014) el presi Obama estuvo de visita oficial en Birmania y su objetivo era abrazar a Suu Kyi. El presidente Thein Sein le cito en la nueva capital del pais (sede del gobierno) pero la escasa agenda no le permitia viajar a saludar y abrazar a la lider del NLD (que vive en Yangon), asi que le pidio que viajara el …. y asi lo hizo….
Mi amigo John Berry (que viajo a principios de este año) escribe en su blog que decir que eres americano equivale a recibir sonrisas y efusiones. Mientras que en Tailandia soy yo quien dice que soy de Barcelona, (futbol, Messi, etc.) en Birmania ha sido Louise la que dice la palabra clave: «yo americana, Obama«.
El miércoles 10 volamos con aerolinea malaya a Yangon (antigua Rangun) y ya desde el mismo aeropuerto empecé a sentirme en país socialista del tipo ex Rumanía, ex Bulgaria, ex Unión Soviética pero con la diferencia de encontrarme con gente sonriente y servicial a pesar de la imposibilidad de entendimiento. Si difícil es encontrar gente que entienda inglés en Bangkok, en Yangon es casi imposible. Anécdota increíble: Louise se olvidó un cinturón en el avión y de pronto, mientras esperábamos las maletas, apareció un empleado de la aerolínea con el obeto perdido y se dirigió a nosotras (no a otro pasajero/a) con una sonrisa triunfadora y feliz. Nuestro asombro fue total. Esto es Birmania.
Un taxi nos llevó al hotel y allí nos instalamos dispuestas a descubrir un país en rápido desarrollo pero lleno de tradiciones milenarias, y sobre todo asombrarnos con la arquitectura de sus miles de templos y pagodas. No solo están construyendo una mega terminal en el aeropuerto, sino a lo largo del camino se ven un sin número de edificios en construcción. Grandes carteles en japonés, koreano y chino me hacen sospechar que los ‘amables vecinos’ andan a la caza del tesoro birmano que encierran las arcas de este gobierno militar corrupto (opinión generalizada de la gente del pueblo con la que hablé).
Los tres dias de Yangon fueron muy calurosos pero nos habian recomendado hacer un recorrido en tren (un destartalado tren circular que da vuelta a la ciudad en 3 horas) y eso hicimos. Desde las amplias ventanas pudimos ver la terrible pobreza de algunos barrios y como otros van mejorando a la vista de las opulentas casas que se estan construyendo los ricos empresarios.
La primera tarde hicimos las visitas de costumbre. El gran parque Kandawgyi con lago y palacio flotante y la pagoda de Shwedagon. La luz del atardecer fue el toque inspirador para nuestro aterrizaje.
La mejor luz para ver la pagoda de Shwedagon es la de la mañana, pero es a partir de las 6 de la tarde cuando empieza el ritual de las luces y Shwedagon despierta. Un ejército de barrenderos se materializa para mantener el suelo impoluto, y la multitud que llega a estas horas comienza a encender velas y varas de incienso, dando al lugar una luz mágica.
Curiosidad: la moneda local (Kyat) vale muy poco, asi que en el aeropuerto nos dieron fajos de billetes que nos durarian varios dias. En la foto muestro la modica cantidad de 100US$.
Otra cosa util para los viajeros es que en estos paises han instalado enchufes multiuso por lo que no hemos necesitado ningun tipo de adaptador para celular phones, table, Pc, cepillo dental, etc….
La experiencia de nuestros movimientos en tren fue muy exotica (por decir algo), y creo que las fotos hablan por si solas.
Pero tambien lo que pudimos ver desde los ventanales o en las estaciones nos mostro la vida que siempre existe a orilla de las vias de un tren, y mas en estos de la epoca colonial britanica (en India es mas de lo mismo). Curiosidad: las mujeres y ninos en Birmania usan, desde tiempos inmemorables, un producto sacado de rallar la corteza de un arbol como protector solar. Es el Thanakha, una pasta amarillenta que se aplican en la cara. Dicen que, ademas, sirve para depilar el vello incomodo. Resulta muy curioso cruzarse en la calle con muchas de ellas.
http://www.vivawoman.net/2014/08/get-fairer-skin-with-your-cheeks-full-of-thanaka-powder/
Imagenes curiosas desde el tren circular.
Yangon cuenta con uno de esos hoteles miticos de la epoca colonial que merecen la pena -al menos- visitar. Es Strand Hotel, y sin saber llegamos a tomar algo el viernes por la tarde, el dia de la semana que los «tragos» son gratis en la Happy Hour …. (mi buen karma me sigue acompanando ;).)
Y decidimos continuar nuestro viaje rumbo al norte, porque deseamos tomar la famosa Road to Mandalay (On the Road to Mandalay by Randle Manwaring) y alli descubrir una de los lugares mas fascinantes de Birmania. …. (continuara, pero sin tildes… sorry)